El operador intermodal de Transportes Portuarios (TPNova) comercializará una nueva ruta ferroviaria de mercancías entre Madrid y Perpignan (Francia), con transbordo en la terminal de Can Tunis (Barcelona). El servicio se iniciará esta misma semana (1 de junio) para el tramo que discurre en ancho ibérico, entre la terminal de Madrid-Abroñigal y la instalación catalana, con dos trenes semanales. A partir de septiembre, la compañía espera incorporar la tercera frecuencia semanal, a la par que se completará el enlace en ancho UIC con la terminal de Saint Charles, en Perpignan, a través del tramo internacional que gestiona LFP Perthus. Según confirman desde TPNova, Renfe Mercancías es la empresa ferroviaria que dotará de tracción y material rodante a ambos tramos del servicio.
Los costes energéticos han retrasado la apertura del servicio de TPNova entre Can Tunis y Perpignan
El general manager de la entidad, David Gómez, ha señalado que su empresa “había recibido solicitudes y propuestas para abrir ese corredor”, que en el caso de Barcelona-Perpignan “no tiene servicio ferroviario”, a la vez que se detectaba una demanda en cuanto al enlace entre Francia y Can Tunis, ya que “todo lo que llegaba a la terminal catalana se quedaba ahí”. Sin embargo, los elevados costes energéticos habrían impedido la apertura de la ruta completa hasta ahora. Actualmente, el directivo manifiesta que “con la situación más estable a nivel de costes de energía hemos sido capaces de tener un coste competitivo y, espero, un servicio fiable”. La ruta se abre en dos fases para monitorizar la situación generada por las huelgas en Francia, de forma que “salimos ahora para tener riesgos más controlados e ir generando el servicio con los clientes ya interesados”, ha explicado Gómez, antes de añadir la tercera frecuencia y el enlace con a Perpignan.
“Queremos conectar terminales que tienen potencial para el transporte internacional”
David Gómez General Manager de TPNova
Una vez abierta toda la ruta, los trenes operados por TPNova deberán realizar transbordo en Can Tunis, donde las mercancías se cargarán en otro tren de Renfe en ancho estándar. La operación se llevará a cabo en la terminal intermodal, que actualmente licita su gestión y para la cual se ha presentado Transportes Portuarios, la empresa matriz de TPNova. Según David Gómez, sus composiciones serán multicliente y admiten “cargar desde contenedores de 20 pies a cajas móviles de 40 y 45 pies, y también cisternas”. Asimismo, el tren tiene habilitado el transporte de mercancías peligrosas, aunque el directivo matiza que “nuestra intención no es hacer un tren de químicos pero sí queremos poder dar servicio a distintas tipologías de carga”. En cuanto a la capacidad de los trenes, estarán formados por “vagones de 60 y 90 pies con el equivalente de espacio a 42 contenedores”, ha concretado.
Desde TPNova señalan que la estrategia principal de la empresa consiste en “enlazar terminales que vemos que no tienen conexión, o que están desatendidas o tienen potencial para ofrecer distintas opciones de transporte internacional”. En el caso de Can Tunis, su emplazamiento en la línea del Corredor Mediterráneo la hace idónea para “generar varias conexiones internacionales”, argumenta David Gómez. De este modo, “el proyecto ferroviario que estamos poniendo en marcha” busca habilitar rutas que conecten con Bettembourg (Luxemburgo) y Duisburgo (Alemania) desde la terminal catalana, y también a varios destinos europeos desde la instalación de Perpignan.
